Uy, te lo choqué

No cualquiera destruye el célebre coche de James Bond, valuado en 250.000 dólares. Y menos antes de que se empiece a rodar la escena.

El desdichado de marras se llama Fraser Dunn. El hombre de 29 años llevaba el Aston Martin al lugar de rodaje, pero perdió el control del coche el cual cayó en el lago de Garda (norte de Italia).

Afirman que Fraser no sufrió más que unas contusiones... por ahora, porque es probable que los productores lo caguen a trompadas.

Comentarios